El entorno es encantador. La bienvenida es cálida. Una observación común entre los talleres que componen el pueblo alfarero de La Borne. Dominique Garret no escapa a la regla, él que se instaló hace casi 40 años en la localidad de Berry. Con su compañera Roz Herrin, trabajan, tornean, cocinan, decoran sus ollas, platos, trabajan para exhibirlos y ofrecerlos a la venta. Una pasión y un saber hacer únicos.
Una pasión, la de un joven estudiante del Centro Internacional de Formación en Artes y Cerámica (CNIFOP) en Saint-Amand-en-Puisaye. El joven Dominique descubrió el cine a través de su hermano, “que daba clases en un centro de Corrèze, lo visité y me llevó en un torno, me resultó muy agradable”, recuerda. Después de una pasantía de 9 meses con el maestro alfarero Owen Watson y luego con el CNIFOP, diríjase a Cher y al pueblo de La Borne. “Cuando empiezas a aprender el oficio, inmediatamente te enteras de La Borne”.
Encuentra un taller, en el que trabajaban tres personas. La atracción es inmediata. Para el trabajo primero: “Me dije a mí mismo, si esto es cerámica, ¡es realmente genial! ". Para la ciudad y la región entonces: “es un país fuerte, es muy interesante para el turismo con los viñedos, los castillos… ¡Me gusta andar en bicicleta aquí! ". Y los turistas lo devuelven, con un número cada vez mayor de visitantes, especialmente cuando hace buen tiempo. De ahí el interés de estar abierto “casi todo el tiempo: para vivir en La Borne, ¡hay que estar abierto! ".
El saber hacer único se debe a que las técnicas fluctúan según los alfareros. “Nosotros no hacemos el mismo trabajo en absoluto, mi método es diferente al de mis vecinos”, especifica el ceramista. En su taller, hace malabares entre cocinar con gas, sal y leña. Para resultados con diferentes tonalidades y múltiples contrastes. El revestimiento para dar color, llamado engobe, decora el conjunto: el efecto azulado del cobalto para sus obras de gas, un borde de porcelana blanca para otras vasijas. La sal dará un efecto de “piel de naranja”.
Las creaciones terminadas se exhiben directamente en el taller de Dominique Garet y Roz Herrin en su granero recientemente renovado, y algunas también en el Centre Céramique Contemporaine. “Tenemos una comunidad comunitaria muy importante”, explica. Los intercambios son en efecto numerosos, primero con el Centro, y también entre los 70 miembros de la Asociación de Ceramistas de La Borne. Entre otras cosas, renuevan el festival Grands Feux durante el cual los fans observarán la cocina al principio de la semana y descubrirán el resultado al final de la semana.
Dominique Garet está orgulloso de su profesión, de compartir los secretos de una disciplina que en un momento estaba en declive. Hoy, “es una profesión que gusta, y que cada vez se feminiza más”, se regocija. Los hornos son cada vez más pequeños y las piezas de moda también lo son. Hacer este trabajo requiere mucha más precisión de lo que piensas. El alfarero / ceramista también debe ser un equilibrista y, sobre todo, es una pena, no ser torpe.
Dirección del taller:
Taller Garet Dominique – Herrin Roz
El Borne – 18250 Henrichemont
(0) 2 48 26 75 23
https://www.laborne.org/fr/dominique-garet/
Fechas para recordar en La Borne:
Grands Feux (26 de octubre al 2 de noviembre de 2019): conferencias, proyecciones, cursos, demostraciones...
Más información sobre www.laborne.org
